En el World of Business Ideas (WOBI), escuché una interesante conferencia acerca de las tareas creativas. Hace décadas, predominaban las tareas mecánicas y repetitivas, como en una línea de ensamblaje donde la persona tiene que realizar la misma tarea una y otra vez, y la motivación dada es “Si haces esto así, entonces te daré ‘x’ cantidad de dinero”.

 

Hasta que entonces, los científicos encontraron que este tipo de motivación no funciona bien para tareas creativas, donde hay que conceptualizar y buscar respuestas a preguntas nada obvias. El problema es que este conocimiento no ha llegado apropiadamente al mundo del trabajo, al mundo de los negocios de hoy.

 

 

La investigación se basó en reunir a un grupo de artistas y se les hizo seleccionar 10 proyectos comisionados y 10 proyectos no comisionados, es decir, 20 proyectos por artista. En total fueron 460 trabajos artísticos, y las obras se presentaron a un panel de expertos: Conservadores de museos, artistas, administradores de galerías de arte, etc.

 

Ellos no sabían de dónde venían estos trabajos, y se les pidió que los evaluaran. Los resultados fueron asombrosos: “Los trabajos comisionados fueron calificados como menos creativos que aquellos que no fueron comisionados, y sin embargo, no se les evaluó de diferente manera a ambos en calidad técnica”. Pero, ¿cómo es posible que un trabajo sea calificado como menos creativo aun manteniendo el mismo estándar de calidad de técnica? La lección de la investigación fueron las restricciones.

 

  • Imagina que eres un pintor. Entonces te encargo que hagas una pintura para mi casa, y te comisiono para que hagas algo asombroso. Te pagaré $10 mil pesos. Me encanta como pintas y confío en que harás un trabajo extraordinario. Ese es un tipo de comisión.
  • El otro tipo de comisión es: Te encargo que hagas una pintura para mi casa, y te comisiono para que hagas algo asombroso. Te pagaré $10 mil pesos. Me encanta como pintas y confío en que harás un trabajo extraordinario, pero necesita ser apropiada, porque tengo niños en mi casa, así que no puede ser nada violento o sexual. También, tengo un sofá verde en mi casa, así que tiene que combinar. Este es otro ejercicio, pero con varias restricciones.

 

No declares restricciones en tu empresa, motiva la creatividad a través de principios.

 

Lo que la investigación nos dice es que algunas restricciones están bien, pero si pones demasiadas entonces estarás limitando la capacidad creativa de la persona comisionada. “Puedo hacer una muy buena pintura, pero con tantas restricciones realmente no será mi estilo, no será uno de mis mejores trabajos”.

 

Todos los trabajos en el mundo son comisionados, pero el nivel de restricciones que haya para un puesto determinará el nivel de creatividad, capacidad de solucionar y autonomía de una persona. No es una cuestión de pagar mucho dinero, y tal vez, en vez de restricciones, deban ser principios y valores como guía para que las personas vuelen en torno a los ideales de la organización.

 

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *